Carmen se desdibuja como nadie en el Arte del Mujerío.
¿Cuál es el Arte del mujerío?
Es recuperar el cuerpo enraizado, la contundencia de la mujer, la irradiación y todas esas facetas. Es ese viaje a lo femenino en que vas jugando con todos esos registros que te habitan para que puedas usarlos en tu vida. Hay mujeres que utilizan muy pocos recursos. Si tienes tanto y sólo usas dos, empiezas a secarte. El arte del mujerío es poner en la acción lo que somos.
¿Qué es el sexo y qué nos hemos creído que es?
Vete tú a saber lo que es (risas). Para empezar creo que hemos aprendido una sexualidad con muchas cualidades masculinas. Tiene una orientación, una meta y una consecución. Entonces te dices que hay que hacer esto y luego lo otro y luego chinpún! Esto es una parte, pero si hablamos de una sexualidad femenina que sería que no tiene meta, no tiene tiempo…pues diríamos: ¿qué pasa? ¿cómo es esto?
¿Y cómo es esto?
La sexualidad es sentir la vida. Es energía. Durante mucho tiempo, la sexualidad ha estado limitada casi exclusivamente a los genitales. Los genitales hacen mucho; ¡hay que hacer, no hay tiempo para sentir! Para empezar, no hagamos nada. A ver dónde nos lleva. Vamos a sentirnos, a respirar, igual a mirarnos y, a lo mejor, nos surge tocarnos. Hoy será de una manera y mañana de la otra. Para mi una sexualidad consciente es que habite todo el cuerpo.
Más allá de los genitales
Sí. La llamo consciente porque es tomar consciencia. Si no tienes una orientación y una meta tienes más posibilidades que habrá que descubrir
¿Qué podemos descubrir?
Por ejemplo que, si respiras, esa energía se distribuye. Es implosiva, no explosiva. Los genitales son una puerta pero no lo son todo en la sexualidad. Cuando una persona descubre que la sexualidad es más inclusiva, lo que hace es generar energía, estímulo. Si lo comprendes, lo respiras y lo mueves por tu cuerpo, otros canales circulan, otras glándulas se nutren. Tienes experiencias de apertura, de éxtasis, o sea, de unión. Lo bueno que tiene la sexualidad es que, de vez en cuando, te da una sorpresa que te lleva más allá.
Hemos sobrevalorado la función de los genitales
Los genitales tienen una sabiduría que no les dejamos expresar porque hacemos demasiado. Cultivar el autoplacer, el autoamor, es muy importante para luego compartir. Es importante que conozcas tu cuerpo y te sientas gozosa en él. Cuando te acaricias y respiras esa caricia, aprendes a estimular tu energía y distribuirla por tu cuerpo. Ahí te das cuenta de que la sexualidad es muy distinto a lo que nos hemos creído. Tiene que ver menos con los genitales de lo que creemos.
La sexualidad ha sido muy falocrática y ha estado al servicio de la sexualidad masculina. Si las mujeres estuvieran en su femenino, incluso cuando hubiese penetración, querrán ser penetradas para sentir y abrirse más. La sexualidad se dirige mucho a la excitación ¡Que es muy divertido follar en la mesa de la cocina!, pero si todos los días basas tu sexualidad en la excitación cada vez necesitas más intensidad porque si no, no te sirve nada. Entonces la mayoría de la gente necesita fantasías todo el tiempo. Por lo tanto ¿dónde estás tú cuando tienes sexo? ¿Quién está ahí?
Conócete a ti misma y luego compártete con el otro
La sexualidad es estar conectada al deseo de vivir y este está en tu raíz. Todo eso, después, lo usas para tomar un té, para darte un buen homenaje, para ir a tu trabajo eróticamente. Siempre les digo a las mujeres: ¡Por favor, los pezones contentos y la vulva jugosa! Cuando estás en el deseo también tu vida es más excelente.
¿Cómo?
No puedes con la mediocridad. Me da igual si barres tu casa. ¡Estás ahí con los jugos puestos! Entregada a lo que haces. Vivir eróticamente, es vivir enraizada, disponible a la vida y con deseo de vivir. Esto no te lo puede dar nadie. Siempre hemos creído, ingenuamente, que esto nos lo puede dar alguien. Lo único que pasa cuando te encuentras con alguien que te despierta esto, de repente, cultivas más la belleza, andas más femenina, tienes mucha más vitalidad…pero bueno, ¿y esto no lo puedes cultivar para ti y por ti? Eres divina igual sola que acompañada. Lo único que la polaridad es un eco y te ha conectado con tu deseo, pero te has olvidado que eso es tuyo y crees que lo provoca la otra persona y eso dura 30 días, 45…¿y luego? Luego ¡hay que cultivarlo!
¿Qué buscamos en el sexo?
Sentir la unión, la entrega, el abandono, el Ser. Por un momento, te abres, te entregas. Mas allá de las distorsiones que pueda tener, es sentir la vida, el éxtasis.
De hecho hay gente que usa la sexualidad para conocerse y ampliar la consciencia
Date cuenta, que en realidad, lo que haces es un trabajo de enraizar, abrir y que circule la energía vital. Es como una bomba atómica. Si eso va hacia fuera es un desperdicio. Si eso se distribuye por dentro, te sientes más vital, más creativa, con salud. Es una energía disponible, también, para que la dirijas a una intención.
¿Por ejemplo?
Tienes un proyecto y dices: “¡¡este super orgasmo…para este proyecto!!” o, un amigo necesita apoyo, y ¡venga! este homenaje te lo dedico hoy. Es que es una energía super poderosa. Es combustible en tu cuerpo circulando.
Cuando dejas de pensar: si la cojo por aquí o la meto por allá y estás en el momento presente, y respiras, ya eso es muy distinto ¿Cuántas mujeres están presentes en el interior de su vagina durante una sexualidad penetrativa? ¿Cuántos hombres tienen consciencia de que tienen un falo luminoso que es la consciencia irrumpiendo ahí para iluminar esa cueva? Muy pocos.
Cuando un hombre valora su sexo no sólo porque me pica y la tengo que meter, si no porque realmente sabe que, a través de esa parte de su cuerpo, puede canalizar la consciencia, que puede transmitir amor y abrir mucho más lo femenino, una mujer lo siente super rápido porque lo femenino es muy sensible a la intención.
Ya…
La sexualidad es lo más poderoso que hay y es lo que está más manipulado. Sobretodo, en las mujeres. De cintura para abajo hemos sido machacadas.
Adolescencia y sexualidad.
Un adolescente aprende con Internet a base de pornografía, por ejemplo. Con poco respeto por el cuerpo. Un adolescente no está preparado para tener una sexualidad penetrativa porque no maneja su energía. Lo único que va hacer es pasar de hacerse una pajilla a hacerse una pajilla con otro. Esto no se enseña en los institutos. Sólo hablan de las enfermedades y tal, no de la comunicación sexual. Entonces, el sexo es muy penetrativo. Esto, forma parte pero no es sólo eso.
Hay una labor importante de educación.
Está toda por hacer porque no se pasa de la información Es una lástima porque lo agradecen. Cuando mi hija tenía 16 años me pidieron en la escuela de hacer un taller. Fue super bonito. Ahora tienen 26 años y todavía se acuerdan. Les mandaba como tareas: mañana os vais a masturbar como hacéis siempre y vais a añadir lo que hemos aprendido hoy, a respirar, a parar…en fin. Al día siguiente, pregunté qué ha pasado y uno me dijo que había durado más y había sido más excelente.
Para mi fue doloroso ver en ellas ese paso de estar en el deseo de vivir a ser deseables. Eso es tremendo. Ni saben porque pero se cuestionan si su cuerpo es o no bonito. Te puedes imaginar cómo estaban.
Divinas
Divinas. Fue doloroso sentir que ya es algo social; las revistas, los anuncios..Los cuerpos se transforman. Sentir si eran deseables para los chicos, para el mundo, imagínate. Una mujer pierde toda su fuerza si está pensando en si tiene el culo grande o no, si vas a ser elegida o no, las tetas así o asao…Hay mucha tarea en recuperar esa fuerza de lo femenino donde tu eres lo que eres.
¿Qué es eso de lo masculino y lo femenino?
Siempre hay dos fuerzas que operan en todo. En realidad, son cualidades que siempre están en cada uno operando y que pueden estar más o menos desarrolladas, exageradamente potenciadas o inhibidas. Son dos fuerzas que se atraen o se repelen. Si una mujer está mucho en su polaridad masculina, siempre va a atraer parejas, da igual del mismo sexo o del opuesto, que tenga más cualidades femeninas porque si no, no habría atracción. Habría repulsión. Entender la polaridad es muy importante para entender la vida. Es estar en el Ser y tener a la vez una dirección en la vida.
¿Cuales son las cualidades para cada polaridad?
Lo masculino, independientemente si eres hombre o mujer, es la consciencia, el orden, la dirección, el logos, el discernimiento, la presencia, las metas y objetivos. El poder irrumpir en tu vida con una dirección hacia una meta. En el sexo masculino lo vemos muy claro porque hay una fuerza que quiere penetrar la vida, un vacío, o lo que sea.
Podemos decir que esto da un orden sobre todo mental a nivel concentración.
¿Y lo femenino?
Lo femenino es la fluidez, el cambio, la irradiación, la apertura. Es la vida. La vida esta continuamente cambiando. Lo femenino cambia con las estaciones, con la luna…Es fluido, es cambiante porque lo femenino puede ser como el mar, tan pronto está calmo y de repente, pasar a ser un tsunami que lo destruye todo. La vida es esta paradoja
¿Cuál es pues el reto?
El reto de lo femenino es vivir esto. Una mujer está continuamente cambiando. Su biología es cambiante, sus hormonas cada x días están cambiando. Esto hace que como mujer te sientas con registros distintos, que tengas intereses distintos. Nuestra vida pasa así de cíclica como la naturaleza. Esto es irradiación , es belleza, es ese fluir. Lo masculino sería más lo que contiene. Es como las orillas del rio que contienen al agua para que lo femenino fluya.
¿Qué ha pasado con las mujeres?
Las mujeres de una generación de 50 a 60 años hemos desarrollado mucho las cualidades masculinas. Hemos salido al mundo de una situación deficitaria para buscarnos la vida. Hay una irrupción en la vida social y política. Esto son cualidades más de lo masculino. Tomar una meta y una dirección hacia fuera. Pero muchas mujeres en esta salida al mundo han rechazado las cualidades de lo femenino. Que nada se parezca a lo que fuera la madre. Rechazar a la madre es rechazar mucho de lo femenino. Hoy se habla de lo femenino, se hacen círculos de mujeres, se habla del útero, se pinta con la menstruación. Antes era mal visto. Ha habido toda una evolución.
¿Qué requiere recuperar lo femenino?
Lo femenino requiere ir a la profundidad, cultivar mucho al ser, habitar las entrañas de ese universo que es femenino y que acoge. Acoger la vida con lo que hay. Esto ya es intenso. Cuando una mujer comprende el universo que es, acoge la vida con lo que hay. Hay gente que se pasa la vida meditando para sentir eso, para tener ese espacio de apertura y sentir que no hay juicio, que los opuestos se unen. Hay una capacidad de transformar lo que es transformable y de acoger lo que no se puede transformar. Esto ya es de gran profundidad.
Eso no nos lo han enseñado
Como la polaridad nadie nos la enseña pasa que muchas mujeres nos hemos polarizamos en lo masculino y algunos hombres lo han hecho en lo femenino. No sé si les hacia falta o no les ha tocado otra. También han explorado una parte que les hacía falta para poder ser más vulnerables, más sensibles, poder estar más a la escucha, etc. Pero cuando no lo haces desde tu polaridad te quedas descafeinao. Así ves mujeres super potentes y hombres descafeinados. Que sí, son más sensibles pero les falta testosterona masculina al servicio de su sensibilidad. Claro, las mujeres, casi siempre, atraen hombres mucho más femeninos. Al principio funciona muy bien, pero luego quieres también que lo masculino tome la dirección. Si el día de tu cumpleaños has de elegir tú el regalo, el restaurante que quieres ir y siempre estás tomando la dirección no te puedes abrir como mujer para ser penetrada por la vida ni por tu pareja. Ahí una pareja entra en conflicto, cuando uno de los dos quiere ejercer su polaridad más en la intimidad. En la intimidad si no hay polaridad se neutraliza una pareja que es lo que suele pasar.
¿En la intimidad te refieres al sexo?
Y a la comunicación en una pareja. Sobretodo al sexo. Si no hay polaridad no hay sexualidad. Tú puedes querer mucho a una persona pero eso no te garantiza tener sexo porque lo que da el sexo es la polaridad. Como la electricidad, si hay dos polos opuestos se atraen, si no se repelen. Para que puedas jugar tiene que haber polaridad, si no habrá mucho corazón, pero no sexualidad.
¿Para que más nos sirve ese juego de polaridades?
El juego de la polaridad, en realidad, sirve para ir más profundo en una relación. Para abrirte más y no cerrarte. Lo femenino continuamente se quiere cerrar: te miro mal y te cierras. Te mosqueas y te cierras, y te cierras en el cuerpo. El reto de lo femenino es estar abierta y disponible a la vida. Que puedas poner los límites. La mujer tiene que saber esto en su cuerpo. Una mujer que no emite es que está con todo encapsulado. Así como lo femenino que no tiene raíz se pierde, será un caos. Un masculino puede ser árido si no tiene incorporado lo femenino, será muy estresante, le faltará corazón. La polaridad da mucho de si
¿Que una mujer esté más en la polaridad masculina significa que es lesbiana?
No tiene nada que ver. La opción sexual cada uno la elige. Hay hombres que son super femeninos que no eligen tener relaciones con hombres. La opción sexual es otra cosa.
Para mi es importante lo de los registros. Independientemente, que una mujer esté en la polaridad masculina no puede perder su registro femenino. Igual que un hombre, si mantiene su registro masculino, tendrá presencia, tendrá peso en los cojones. Normalmente, les falta peso en los cojones.
¿Cómo?
En los talleres los veo. Normalmente, hacemos líneas de hombres y de mujeres y es impresionante. Las mujeres tienen una capacidad energética para penetrar, mayor que la mayoría de los hombres. Les digo: “pero hombre tenéis que hacer pesas. Un poquito de músculo” Es que las mujeres se los comen.
Me temo que hay mucha confusión, Carmen.
Sí. Como el hombre no quiere ser el prototipo de antes de hombre masculino, se ha confundido. Está muy bien el cambio pero un hombre ha de estar al servicio de lo masculino. Un hombre tiene que tener peso específico. Le tienen que pesar los huevos. Para mantener la vida tiene que tener fuerza. El hombre como no quiere ser ni violento, ni lo que era, pues está castrado.
¡Vaya!
Habría que tomar consciencia que desarrollar lo masculino al servicio de la vida no daña a nadie. La mayoría de los hombres no pueden contener a una mujer. Cuando de repente a una mujer le sale la bruja, el hombre se va. No pueden estar ahí. Cuando puedes estar presente, da igual si lo femenino es un volcán o un tsunami, pues estás ahí, y lo femenino le dura 3 segundos. El día que estás más bruja piruja si lo masculino está ahí abierto de corazón diciendo: “¡venga, dame más, que esto también me gusta!” tú te derrites en dos minutos y te abres. Esto hay que practicarlo. Practicar las polaridades a un nivel profundo implica aprender a manejar lo emocional.
¿Qué está pasando que las mujeres hemos abandonado las faldas?
Esto es significativo porque el pantalón está muy bien pero, algunas es que no tienen falda. Para los talleres se compran expresamente una falda para asistir. Me parece curiosa esta anécdota. Algo que ha sido tan femenino. En realidad, es que chupamos la energía de la tierra. Pero claro como hemos perdido el contacto con la tierra, no tiene sentido que te suba la tierra entre las piernas, pero es así. Lo femenino pasa mucho por recuperar el cuerpo. Sentir esa fuerza de vida en tu cuerpo. La mayoría de las mujeres están en la cabeza. Es toda una tarea para volver a bajar a la raíz.
¿Cómo se hace?
¡No hay que hacer nada! Simplemente, siente tu peso específico en el culo. Siente que tienes caderas poderosas, que tienes un coño que está jugoso. Siéntelo. Hay que bajar a las mujeres a la tierra.
¿En todas las culturas?
En otras culturas ves que están enraizadas, independientemente, de cómo estén esas mujeres. Eso es otro asunto. Sus cuerpos están ahí, enraizados. Lo femenino está ahí. Vas a India y las mujeres están ahí, aunque cada vez menos porque ahora quieren ser como nosotras. Vas a Delhi a un café y no hablan hindú hablan inglés.
Supongo que es cuestión de recuperar, de volver.
Claro! La vida es un juego de dos fuerzas. En realidad, es sencillo.
¿Qué es ser mujer?
Ser mujer es habitar toda esa sabiduría de lo femenino, actualizarla y expresarla en lo cotidiano. No es que haya que hacer grandes cosas.
Si las mujeres fueran conscientes de esto, el mundo cambiaría. Una mujer sola es muy difícil, pero lo femenino tiene otra manera de hacer y en este momento hace falta incorporar lo femenino.
Entrevista aparecida en Carol Coach el 17 de junio de 2013. Entrevista y articulo escritos por Carol Sánchez.